El terremoto en Turquía y Siria deja al menos 6.300 personas muertas y más de 30.000 heridas

Continúa la emergencia tras los sismos de alta magnitud que sacudieron el pasado lunes 6 de febrero el sur turco y el noroeste sirio, con un aumento constante de víctimas mortales y desaparecidos. Las condiciones climáticas de la región dificultan las tareas de rescate, al tiempo que arriban los envíos humanitarios de la comunidad internacional. Con áreas incomunicadas y donde la ayuda aun no llega, las autoridades no pueden estimar el alcance total de daños y pérdidas humanas, donde podría haber miles de niños según Unicef.

La actividad sísmica del 6 de febrero deja graves consecuencias en Turquía y Siria. Si bien las mayores cifras de daños y muertes están del lado turco, las endebles condiciones sirias en una región azotada por la guerra lo llevan a un contexto igual o más delicado.

Este martes son al menos 6.376 las víctimas mortales, una cifra que podría aumentar exponencialmente a medida que avancen las operaciones de rescate. Las gélidas condiciones hacen que estas misiones sean aún más difíciles y a contrarreloj.

Las autoridades turcas confirman por ahora 4.544 fallecidos, mientras que los heridos superan los 26.000. Por su parte, en Siria el conteo va por 1.832 muertos y 3.849 heridos.

No obstante, algunas zonas de ambos países están aisladas, no hay informaciones oficiales y estos números crecerán con el correr de las horas.

Mientras los equipos de rescate trabajan a toda marcha para socorrer a los supervivientes bajo los escombros, la cifra de personas muertas y heridas crece sin tregua. Se cree que cientos e incluso miles aún pueden estar bajo las edificaciones derrumbadas en Turquía y Siria.

La más reciente actualización de las autoridades turcas cifra en 4.544 las víctimas mortales, 26.721 heridos y más de 5.700 edificaciones destruidas. Ante la magnitud del evento, más de 60.000 rescatistas trabajan en las labores de socorro apoyados con aviones y helicópteros en las zonas más afectadas. 

Del lado sirio el conteo es lento, pero también crece: 1.832 muertos y 3.849 heridos con la certeza de que "cientos" de personas, según los Cascos Blancos, aún se encuentran atrapadas. Cientos de contenedores se incendiaron en el puerto turco de Iskenderun en el sur de Turquía, lo que obligó a detener las operaciones hasta nuevo aviso. Las empresas de carga desviaron sus buques a otros puertos de la región.