Fitch insta a mejorar gobernabilidad en El Salvador

La victoria de Nayib Bukele en primera vuelta en las elecciones presidenciales del pasado 3 de febrero representa un quiebre significativo luego de casi tres décadas de gobiernos de ARENA o del FMLN. Por lo que el nuevo presidente enfrenta el reto significativo de construir gobernabilidad, advirtió la firma calificadora de riesgos Fitch Ratings.

Ricardo Castaneda, economista jefe para El Salvador del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI), afirmó de igual forma que Bukele tendrá como reto cumplir con las expectativas, en un escenario que requerirá negociaciones con la Asamblea Legislativa, que desde ya se pintan complejas.

ARENA tiene actualmente 37 de los 84 diputados de la Asamblea Legislativa, el FMLN cuenta con 23, y GANA, el partido con el que Bukele llegó al poder, 10. "Por tanto, hay un riesgo de que aumenten la polarización política y los choques entre el nuevo presidente y la legislatura", indicó Fitch, a través de su comunicado. En el mismo, recordó que este tipo de bloqueos hicieron que el país cayera en un impago selectivo en abril de 2017, cuando el Gobierno se atrasó en los pagos con los fondos de pensión.

La calificadora dijo que Nayib Bukele deberá asegurar apoyos para aprobar las medidas necesarias para desarrollar sus políticas. A la calificadora le preocupa principalmente que no logre los 56 votos que representan la mayoría calificada dentro de la Asamblea, y que son necesarios para aprobar financiamiento externo.

Asimismo, la entidad recordó que El Salvador enfrenta una serie de retos fiscales y económicos, como una deuda pública que equivale al 70 % del Producto Interno Bruto (PIB), y que esperan siga subiendo si no se realiza un ajuste fiscal significativo. A esto se suma un bajo crecimiento económico, de alrededor de 2 % anual, presionado por la alta criminalidad que impera en el país.